Si lo tuyo es mostrar una actitud transgresora hasta para dar sorbos de café, para ello no hay nada mejor que las tazas de graffitis. Si quieres comprar una taza de estas características es porque tienes claro que no eres una persona convencional que bebe café en un recipiente hecho en serie por Ikea, Leroy Merlin o Carrefour.
Diferénciate del resto con una espectacular taza de nuestro catálogo.
Lo primero que debes preguntarte es por qué sigues bebiendo en la típica, triste y sin gracia taza blanca de oficina cuando tienes a tu alcance un montón de tazas con graffitis que encajan con tu personalidad transgresora, única y diferente.
Disfruta las mañanas bebiendo el café con una taza de graffitis, sorprende a uno de tus mejores amigos con un regalo original o llévate tu inconfundible estilo a tu trabajo. Porque la oficina es el mejor sitio donde lucir una tazón de graffitis.
Descubre delante de tus compañeros, familiares o amigos que bajo tu vestimenta, sea ropa hip-hop o de otro tipo, se esconde un auténtico inconformista, porque eres mucho más que lo que luces. Sin salir de tu puesto de trabajo, una de las tazas de nuestro catálogo ser un divertido regalo para aquel compañero que siempre entra los lunes con su peor cara. Aunque puedes optar por regalarte una de las tazas de nuestra tienda para darle un toque de humor al primer día de la semana.
La mayoría de tazas están hechas de cerámica de alta calidad e impresas con tinta premium, duradera para usar, por lo que no se desvanecerá después del uso.
Decenas de tipos de tazas con graffitis.
La gran variedad de tazas de graffitis hace muy sencillo encontrar una que dé con tu estilo personal: si eres una persona más alegre las encontrarás coloridas y de formas divertidas. Si buscas una frase de artistas tan conocidas como Banksy también las tienes o si buscas un diseño rompedor, fuera de toda estética clásica también las encontrarás.
Déjate seducir por las formas, los dibujos y los detalles hasta encontrar la vasija más molona para ti. Porque… si tu rompiste el molde, ¿por qué no puede hacerlo también tu taza de todas las mañanas?
Nosotros ponemos las tazas, pero tú pones el estilo.